Dom
24
Jul
2011

Homilía XVII Domingo del tiempo ordinario

Año litúrgico 2010 - 2011 - (Ciclo A)

Te doy un corazón sabio e inteligente

Introducción

Las lecturas de este domingo nos presentan al joven Salomón que acaba de acceder al trono. Sus dudas, su falta de criterio son percibidas por un Dios que, a través del sueño, le hace sentir que no está solo en su nuevo devenir. El texto nos señala que nuestra forma de estar en el mundo es siempre con y junto a otros/as y que, tanto el lugar desde donde tomamos nuestras decisiones como el hecho de tomarlas precisa de discernimiento y de un gran sentido de la responsabilidad.

Sabemos que no estamos solos/as en esta andadura, como nos recuerda Pablo, y que todo puede servir para el bien. Así que, si nos sabemos gloriados/as y justificados/as es posible que podamos descubrir la presencia de su bondad entre nosotros/as. Quizá, ese sea el tesoro al que se refiere Mateo en su Evangelio. El autor nos invita a descubrir algo completamente novedoso. La clave que nos ayuda a saber que es cierto es precisamente la alegría inmensa, como la que sintieron aquellos Sabios que venían de Oriente persiguiendo la Salvación.