Dominicos España

Los dominicos, Orden de Predicadores, somos una orden religiosa de la Iglesia Católica fundada por santo Domingo de Guzmán. Nuestra misión es la predicación de la Buena Nueva, que brota de una vida de contemplación, estudio y comunidad.

Los Dominicos en España estamos presentes en prácticamente todo el territorio nacional, en las comunidades autónomas de Galicia, Asturias, Cantabria, País Vasco, Navarra, Aragón, Cataluña, Castilla y León, Castilla La Mancha, Extremadura, Madrid, Andalucía, Valencia, Murcia, Baleares y Canarias.

Las comunidades de frailes dominicos en España pertenecen a dos entidades diferentes: la Provincia de Hispania y el Vicariato del Rosario.  La Provincia de Hispania nació en 2016 como fruto de la unión de las antiguas Provincias de Aragón, Bética y España y está formada por 380 frailes en 35 comunidades en España. El Vicariato del Rosario depende de la Provincia misionera del Santísimo Rosario y cuenta con 80 frailes y 8 comunidades en nuestro país.

Si quieres conocer algo más acerca de la Provincia de Hispania y del Vicariato del Rosario, puedes consultarlo en sus páginas web:

Provincia de Hispania

 

Vicariato del Rosario en España


Además de en España, ambas entidades están presentes en los vicariatos de Perú, Venezuela y América del Sur (Uruguay, Paraguay y ciudad de Buenos Aires), Cuba y República Dominicana, en la casa de Malabo (Guinea Ecuatorial) y en una casa en Roma.

La misión de Dominicos España se distribuye en distintas actividades apostólicas: docencia en centros universitarios propios y ajenos (civiles y eclesiásticos), así como investigación y publicaciones; gestión, enseñanza y animación pastoral en colegios propios y ajenos; actividad misionera y procesos de promoción humana y evangelización; asistencia social e instituciones de solidaridad; pastoral cultual y sacramental en Santuarios e Iglesias de predicación; pastoral parroquial.

También se desarrolla en apostolados especializados (medios de comunicación social e internet, jóvenes, centros propios y diocesanos de la familia, grupos de oración y contemplación, etc.); movimientos eclesiales y comunidades de base; capellanías y atención espiritual y formativa a sacerdotes, religiosos, religiosas y agentes de pastoral.