Dom
12
Dic
2010

Homilía Tercer Domingo de Adviento

Año litúrgico 2010 - 2011 - (Ciclo A)

Ellos verán la gloria del Señor, la belleza de nuestro Dios.

Introducción

Avanza el tiempo de Adviento, el tiempo de la espera… y la liturgia de la Iglesia configura este domingo desde la llamada a una alegría profunda que nace de la confianza en la promesa de vida y salvación que refleja la primera lectura por medio del profeta Isaías.

Es el domingo GAUDETE, domingo de alivio y/o de alegría. La tradición nos será recordada en muchas de nuestras iglesias por medio de una vela de color más claro en la corona de Adviento o del alivio del color morado en el ropaje litúrgico. Todo indica un renacer, un amanecer, una proximidad de la luz que necesitamos para caminar. La claridad siempre aporta confianza en la noche de las tinieblas por muy tenue que sea ésta.

Confianza, alegría y belleza son un tríptico permanente en la experiencia humana de la fe. El adviento permanente en que ha de vivir el cristiano es una llamada a crecer en la confianza que rezuma de los signos de alegría y belleza. Signos de luz como llama un viejo poeta inglés a la belleza y a la alegría.