Dom
27
May
2012

Homilía Domingo de Pentecostés

Año litúrgico 2011 - 2012 - (Ciclo B)

El Espíritu de la verdad os guiará hasta la verdad plena

Introducción

En este ciclo B del año litúrgico, las lecturas bíblicas del día de Pentecostés evocan tres importantes consecuencias del influjo del Espíritu Santo en la vida de los creyentes.

Un conocimiento íntimo y progresivo de la verdad sobre Jesús (evangelio: Jn 15, 26-27; 16, 12-15). Es decir, una compenetración con su persona y su mensaje, a partir del testimonio interior de su Espíritu y del testimonio exterior de su palabra escrita, transmitida e interpretada en la comunidad eclesial.

Una libertad de acción por encima de las fronteras de la ley (2ª lectura: Gál 5, 16-25). O sea, una manera de obrar que va más allá de las prescripciones formales, que no teme la amenaza de las incomprensiones, que se atiene a las decisiones maduradas bajo la guía del Espíritu, que da frutos duraderos en la vida personal y en la convivencia fraterna y ciudadana.

Un lenguaje capaz de hablar de Dios de manera accesible y convincente (1ª lectura: Hch 2, 1-11). Consecuencia de lo anterior, se expresa con la sencillez del compañero de camino, con el ardor del convencido, con la autoridad del comprometido en los entresijos del mundo.