Lun
1
Nov
2021

Homilía Todos los Santos

Año litúrgico 2020 - 2021 - (Ciclo B)

Bienaventurados...

Pautas para la homilía de hoy


Evangelio de hoy en audio

Reflexión del Evangelio de hoy

Una mirada, una certeza y una propuesta

Ana María Díaz, trabajadora social y terapeuta familiar, escribe en su libro, "Los ocho caminos de felicidad": «No es fácil comprender cómo en la propuesta de Jesús, los dichosos ya no son los ricos y satisfechos, sino los pobres, los que tienen hambre, los que lloran y son perseguidos. Esta radical inversión nos lleva a concluir que la propuesta de Jesús no es una propuesta “marketera”. No responde a anhelos periféricos. Es una propuesta que solo comprende quien la ha vivido. Por esto, las bienaventuranzas son una exhortación en nombre de la propia experiencia de felicidad. Tiene un cierto carácter secreto, sólo comprensible para quienes han pasado por la experiencia.» Tenemos este modelo en los santos que nos han precedido.

Los textos de la liturgia de hoy nos presentan una forma de mirar, una certeza y la renovación de una propuesta de vida.

La visión nos es transmitida por el relato del libro del Apocalipsis. El texto nos ofrece una mirada de esperanza en tiempos difíciles. El triunfo de Cristo, el Cordero, que trae la salvación a todos. Se nos invita a la alabanza. Por un momento somos parte de la liturgia en la Jerusalén Celeste, junto todos aquellos que han entregado su vida generosamente.

La certeza nos viene dada por el fragmento de la carta de san Juan. Dios es Amor, y desde la dinámica del amor nos engendra como hijos. Ser hijos de Dios nos va configurando de una manera nueva. Nos vamos reconociendo hermanos en medio de un mundo plural. «Si toda persona tiene una dignidad inalienable, si todo ser humano es mi hermano o mi hermana, y si en realidad el mundo es de todos, no importa si alguien ha nacido aquí o vive fuera de los límites del propio país.» (FT 125). Estamos llamados a ser reflejo de esta dinámica del Amor de Dios.

La fiesta de Todos los Santos nos invita a renovar el camino de felicidad que nos ofrece Jesús y que Él manifiesta en las Bienaventuranzas.

El Papa Francisco nos ha exhortado a “Vivir el espíritu de las Bienaventuranzas, a la luz del Maestro”, como camino de santidad. En los números 67 al 94 de Gaudete et exsultate, va desglosando cada una de las Bienaventuranzas y las va aplicando a lo concreto de la vida. En cada una de ellas el Francisco nos ofrece un breve corolario. Tal vez, hoy pueda ayudarnos hacer memoria de los mismos en forma de binomios:

“Ser pobre en el corazón, esto es santidad”, porque desde allí podemos, “aceptar cada día el camino del Evangelio, aunque nos traiga problemas.”

“Reaccionar con humilde mansedumbre, esto es santidad”, que nos lleva a “sembrar paz a nuestro alrededor.”

“Saber llorar con los demás, esto es santidad”, que nos permite, “mantener el corazón limpio de todo lo que mancha el amor.”

En el corazón de su propuesta Jesús nos anima a “buscar la justicia con hambre y sed, esto es santidad”, para, “mirar y actuar con misericordia.”

Que la Fiesta de Todos los Santos nos permita hacer memoria agradecida y nos impulse a construir el Reino cada día.