Dom
4
May
2014

Homilía III Domingo de Pascua

Año litúrgico 2013 - 2014 - (Ciclo A)

Y, levantándose al momento, se volvieron a Jerusalén

Introducción

El encuentro con Jesús Resucitado es el principio y fuente de toda la vida cristiana. A lo largo de las lecturas de las semanas de Pascua éste ha sido el sujeto recurrente, un verdadero leitmotiv. Ya en la Vigilia Pascual se nos proclamó el Evangelio de las dos Marías que iban al sepulcro y se encontraban con el Señor que las enviaba a los apóstoles a predicarles que fueran a Galilea (Mt 28, 1-10); el domingo de Pascua fue el turno de la «carrera de la fe» hacia la tumba vacía entre los dos más significativos apóstoles: Juan y Pedro (Jn 20, 1-9). Durante la semana de Pascua pudimos leer algunos de los fragmentos más emblemáticos de esta temática como fue la aparición de la Magdalena al Resucitado (Jn 20, 11-18) y la de los discípulos de Emaús (Lc 24, 13-35). Precisamente la liturgia nos propone hoy revisitar este evangelio, y lo hace sabiamente, ya que su riqueza y profundidad como catequesis de la vida cristiana es inagotable.