Dom
12
Jun
2011

Homilía Domingo de Pentecostés

Año litúrgico 2010 - 2011 - (Ciclo A)

Recibid el Espíritu Santo

Introducción

En el día de Pentecostés tenemos el cumplimiento final de la misión de Jesucristo, y la inauguración de la era mesiánica del Reino de Dios, prolongada en este mundo por medio de la Iglesia. El día cincuenta es el inicio de la época que está más allá de las limitaciones de este mundo, siendo cincuenta el número que representa el cumplimiento eterno y celestial en la espiritualidad mística, tanta judía como cristiana: siete veces siete, más uno.

Pentecostés puede ser un buen momento para sintonizar con la voz de Dios que habla el idioma de tu propio corazón. Dentro de ti resuenan muchas voces, lo sabes y las reconoces. Incluso hablas con ellas. Son ecos del pasado, del presente incierto o de un futuro soñado. Pero lo que importa es el aquí y ahora. El silencio, la desnudez de tu alma donde puedas descubrir a solas una Presencia adorable que te estaba esperando. Para hacerte bien y a través tuyo hacer bien al mundo.