Mar
15
Oct
2024
Venid a mí todos los que estáis cansados

Primera lectura

Lectura del libro del Eclesiástico 15, 1-6

Así obra el que teme al Señor, el que observa la ley alcanza la sabiduría.
Ella le sale al encuentro como una madre y lo acoge como una joven esposa. Lo alimenta con pan de inteligencia y le da a beber agua de sabiduría.
Si se apoya en ella, no vacilará, si se aferra a ella, no quedará defraudado.
Ella lo ensalzará sobre sus compañeros y en medio de la asamblea le abrirá la boca.
Lo llenará del espíritu de sabiduría y de inteligencia y lo revestirá con un vestido de gloria. Encontrará gozo y corona de júbilo, y un hombre eterno recibirá en herencia.

Salmo de hoy

Salmo 88, 2-3. 6-7. 8-9. 16-17. 18-19 R/. Contaré eternamente las misericordias del Señor

Cantaré eternamente las misericordias del Señor,
anunciaré tu fidelidad por todas las edades.
Porque dijiste: «La misericordia es un edificio eterno»,
más que el cielo has afianzado tu fidelidad. R/.

El cielo proclama tus maravillas, Señor,
y tu fidelidad, en la asamblea de los ángeles.
¿Quién sobre las nubes se compara a Dios?
¿Quién como el Señor entre los seres divinos? R/.

Dios es temible en el consejo de los ángeles,
es grande y terrible para toda su corte.
Señor de los ejércitos, ¿quién como tú?
El poder y la fidelidad te rodean. R/.

Dichoso el pueblo que sabe aclamarte:
caminará, oh Señor, a la luz de tu rostro;
tu nombre es su gozo cada día,
tu justicia es su orgullo. R/.

Porque tú eres su honor y su fuerza,
y con tu favor realzas nuestro poder.
Porque el Señor es nuestro escudo,
y el Santo de Israel nuestro rey. R/.

Evangelio del día

Lectura del santo evangelio según san Mateo 11, 25-30

En aquel tiempo, tomó la palabra Jesús y dijo:
«Te doy gracias, Padre, Señor de cielo y de la tierra, porque has escondido estas cosas a los sabios y entendidos y se las has revelado a los pequeños. Sí, Padre, así te ha parecido bien. Todo me ha sido entregado por mi Padre, y nadie conoce al Hijo más que el Padre, y nadie conoce al Padre sino el Hijo y aquel a quien el Hijo se lo quiera revelar.
Venid a mí todos los que estáis cansados y agobiados, y yo os aliviaré. Tomad mi yugo sobre vosotros y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón, y encontraréis descanso para vuestras almas. Porque mi yugo es llevadero y mi carga ligera».

Reflexión del Evangelio de hoy

Encuentro con la sabiduría existencial

Preparando esta reflexión sobre las lecturas de esta fiesta, en Alba de Tormes, donde Santa Teresa de Ávila está enterrada, llega la noticia que están abriendo el sarcófago donde yace. Las razones son múltiples, pero me llamó la atención, cómo desde el punto de vista creyente, lo hacen, para que no se olvide el legado espiritual, renovado y místico que dejo la santa.

Esta monja andariega, que recorrió muchos caminos para impulsar y renovar la vida contemplativa carmelitana, buscó y descubrió, cuál era la fórmula para la renovación espiritual, social y religiosa de aquellos tiempos. Tiempos duros de enfrentamiento cultural y religioso, donde predominaba la imposición, la intolerancia, el fanatismo. Deseando abandonar el país para evangelizar, comenzó su caminar, su viaje de fe, que la llevo a descubrir, experimentar lo que es caminar con una sabiduría existencial.

Sabiduría existencial que no es mucho saber, que no es algo doctrinal, sino que es encuentro con Alguien, que da una fuerza sanadora, que provoca en la persona, que se deja encontrar, admiración y enamoramiento, para que sea ese Alguien el que dé las fuerzas necesarias para afrontar toda la vida y sus circunstancias. Esa sabiduría es la que hace que nuestras relaciones con Dios con los demás, y con nosotros mimos sean sanas.

De esa sabiduría es la que habla la primera lectura: “ella sale al encuentro como una madre, si se apoya en ella no vacilará, si se aferra a ella no quedará defraudado”.  Por aferrarse a ella y actuar desde esa sabiduría existencial, a nuestra santa le hace exclamar. “Nada te turbe, nada te espante, quien a Dios tiene nada le falta. Solo Dios basta”

Actitudes necesarias para la búsqueda y el encuentro con la sabiduría existencial

En el evangelio vemos cómo Jesús da gracias pues va descubriendo quiénes le entienden, le comprenden. Son la gente sencilla la gente que agobiada acude a Él, que la gente humilde, no sabe muchas cosas, pero se acerca a Él y le descubre.  descubren su misión y descubren la sanación que provoca en ellos.

Ese descubrimiento le hace provocar unas invitaciones: todas nos dicen lo mismo: “Venid a mi” los que nos sentimos agobiados, fatigados. Nuestra vida nos produce fatiga, agobios, dificultades y en el encuentro con Él, nos sentiremos aliviados.

Como nos libera hace la llamada a descubrir que Él no impone, sino que su yugo es llevadero y la carga es ligera. Nos propone hacernos la vida, más ligera haciendo la vida más humana más sana, más digna. Jesús nos libera de miedos y prejuicios, que nos hacen vivir intranquilos y mal.

Finalmente, nos invita a aprender de Él. Es el mejor maestro para vivir la vida con una sabiduría enseñada, vivida y experimentada. Hemos de aprender a vivir como él. No propone a sus seguidores algo que Él no vivió. 

Santa Teresa descubrió en el encuentro con Jesús una fuerza especial para actuar y renovar su vida y la de los demás. El Sinodo de la Sinodalidad tiene esta intención, renovar pastoralmente a la Iglesia, para ello, como la santa, dejémonos encontrar con Jesús y aprendamos de Él. No tenemos un maestro mejor. Ni otra fórmula mejor para renovarnos y renovar nuestra pastoral.