Sor Jeanet Pintacasi es elegida nueva priora general de las Misioneras de Santo Domingo
La religiosa filipina sustituye en el cargo a Sor Mª Asunción González tras el XVI Capítulo General celebrado en León
Las religiosas Misioneras de Santo Domingo celebran estos días en León (España) su decimoséptimo Capítulo General (XVI electivo), bajo el lema: “Caminando juntas para transformar nuestra vida y misión”.
Hermanas procedentes de España, Italia, Filipinas, Japón, Taiwán, Corea del Sur, Tailandia, Camboya, Myanmar, Estados Unidos y Chile se han reunido en una asamblea que comenzó con tres días de retiro dirigidos por el P. Francisco Javier Caballero, redentorista. La Eucaristía de apertura tuvo lugar el pasado 15 de julio, presidida por Mons. Luis Ángel de las Heras, obispo de León.

El 19 de julio fue elegida como nueva priora general la hermana Jeanet Pintacasi, natural de Ozamiz City (Filipinas), nacida en 1964 y que también cuenta con la nacionalidad española. Ingresó en el Instituto en respuesta a la llamada de Dios y profesó en 1993. Es licenciada en Derecho Civil y en Canónico por la Universidad del Angelicum de Roma, y diplomada en Teología de la Vida Consagrada por el Instituto Claretiano de Madrid. Además, cursó estudios de Educación en la Universidad de Salamanca.
En la Provincia de España fue profesora y directora del colegio Santo Domingo de Guzmán de Palencia. Durante los últimos seis años ha ejercido como secretaria general en la Casa General en Roma.
Sor Jeanet sucede en el cargo a sor Mª Asunción González Feijóo, elegida como priora general en el Capítulo celebrado en Roma en julio de 2013. Agradecemos a Dios el servicio prestado durante estos años por Sor Mª Asunción y encomendamos a la nueva priora general a la guía del Espíritu Santo y a la protección de la Virgen del Rosario.

El Capítulo continúa en marcha. La asamblea capitular establecerá en estos días las directrices para renovar la vida y misión del Instituto, discerniendo los retos prioritarios que las Misioneras de Santo Domingo están llamadas a afrontar en el mundo de hoy como signos proféticos de esperanza.