dominicosLas dominicas de Trujillo abren comunidad en Kenia buscando futuro vocacional
Sor Salomé Mbuli Kimolya y sor Margarita Mueni Kitheka inician la fundación tras un largo discernimiento comunitario
[Diócesis de Plasencia] A comienzos de este mes, dos religiosas del Convento de San Miguel de Trujillo emprendían viaje a Kenia para poner en marcha una nueva presencia de su comunidad, fruto de un prolongado tiempo de oración y reflexión.
La comunidad del monasterio está formada actualmente por 18 religiosas: ocho españolas, una hermana de Perú, dos de Tanzania en etapa formativa, y siete hermanas de Kenia.
En la entrevista, sor Salomé explica que la decisión nace de una mirada realista a la falta de vocaciones en España y del deseo de “buscar el futuro” del monasterio y de su vida contemplativa.
La fundación llega tras un camino de cerca de tres años de proceso, en diálogo con los superiores y con los permisos necesarios para que la iniciativa sea conocida y acompañada por la Iglesia y por la Orden.
La misión comienza con dos hermanas, acompañadas y asesoradas por los frailes dominicos presentes en el país, que ayudan a concretar el lugar definitivo y los pasos prácticos para asentarse.
La salida no significa cerrar la casa de Trujillo: la comunidad insiste en que se mantendrá la vida del monasterio, con posibilidad de intercambio entre hermanas de ambos lugares.
La nueva presencia quiere aportar ante todo oración, propia del carisma contemplativo dominicano, y una cercanía discreta a las necesidades del entorno, desde la acogida y la ayuda a quienes lo precisan.
Sor Salomé comparte también el cariño recibido en su despedida y la visita del obispo que acudió a bendecir a la comunidad antes del envío.
La entrevista fue realizada con anterioridad al viaje de las hermanas, el 9 de diciembre.