Noticia

Laicos dominicos predicadores

16 de julio de 2014

Unas cien personas participaron en el XLII Encuentro de Familia Dominicana celebrado en Caleruega el pasado fin de semana 11 al 13 de julio.

Como el Maestro General nos había dicho en su carta de diciembre, la predicación dominicana hace posible que Dios se mantenga en conversación con el mundo y los laicos, que llegue a muchos lugares poco accesibles para los religiosos. A ello se refirió Jesús Díaz Sariego encargado de abrir el Encuentro, tras la cálida bienvenida de la Secretaria General de Familia Dominicana, Pilar del Barrio. Fr. Jesús nos propuso hacernos rehenes de nuestro prójimo por amor. El prójimo es el próximo y está tan cerca que podríamos acariciarlo con la mano: lo que a él le pasa, también a mí me pasa. La predicación de los laicos se hunde en el precepto evangélico del amor a Dios y a los hombres.

En la segunda parte del Encuentro los laicos tomaron la palabra y hablaron de sus lugares de predicación: la familia, los hogares de acogida, Internet, el colegio o la universidad. Lugares comunicados, conectados a ese otro lugar compartido por todos: la comunidad, la fraternidad, la Iglesia de Cristo.

Comenzamos con la universidad. En esta primera intervención, Micaela Bunes se nos habló de experiencia, de vocación y de profesión, afirmando de la profesión docente, que es vocación predicadora y que cuando se unen vocación y profesión el trabajo está lleno de vida y de sentido. Ámparo Martín nos dijo que el colegio dominicano educa y predica cuando toda la comunidad educativa participa en un proyecto curricular cuyo eje vertebrador es la pastoral. Rosa María (Rosa) y José Llópez (Pepe) nos abrieron las puertas de su hogar y nos dijeron que su preciosa familia encuentra prolongación natural en su fraternidad y que en ella se fortalecen y preparan para la vida: para afrontarla en su dificultad, para disfrutarla y compartirla en comunidad.

Óscar Salazar sostiene muchas esperanzas anunciando la Buena Noticia a los pobres. Su tierno abrazo sostiene también sus vidas cansadas y necesitadas de amor y alimento.

Alán Rives y José Alberto de Blas nos presentaron la cara amable de Internet y nos hablan de aprovechar las posibilidades que ofrece para anunciar el Reino, que también se abre paso por la red sin aspirar a comunicaciones masivas, estableciendo relaciones personales mucho más auténticas. Ángela Burguet, del Movimiento Juvenil Dominicano, explica cómo las relaciones personales y las TIC ayudan a que los propios jóvenes prediquen a otros.

Laicos y religiosas compartiendo en comunidad el carisma dominicano de la Congregación de Dominicas de la Enseñanza de la Inmaculada Concepción (DEIC), es lo que viven con entusiasmo Marcel Palleja y Betlem Padró que aspiran, como en su matrimonio, a reunir dos vocaciones en un mismo sueño predicador. Marisa de Llaguno, de las Fraternidades Laicales de Santo Domingo, predica la vida enamorada de una Orden con muchos, muchos rostros, todos muy humanos, como los reunidos en Caleruega en este nuevo encuentro de Familia Dominicana que ha vuelto a las fuentes de la predicación para preparar de la mejor manera el jubileo.

Leer la intervención de fr. Jesús Díaz

 Lista de reproducción con los vídeos de todas las intervenciones (iremos añadiendo los que faltan en los próximos días):