Ejercicios espirituales online I

Esta propuesta de ejercicios espirituales es una guía para las personas o matrimonios que deseen avanzar en su relación con Dios y mejorar su vida. Se trata de una experiencia de oración flexible que se adapta a nuestra rutina habitual.


Al empezar

  1. Ponerse en Presencia de Dios: está aquí. me ama, me mira
  2. Un Padrenuestro, despacio
  3. En silencio: adorar
  4. Humildad, sentirse dependientes de Dios. Necesitados de todo
  5. Nos acercamos al trono de la misericordia
  6. Dar gracias: Por la vida que tengo. Por el día de hoy…
  7. Pedirle perdón.
  8. Pedir la gracia de vivir este día de Ejercicios Personalizados.


Día 20: Pedir la Gracia de Dios

La meditación de este día está orientada hacia la oración de petición.

Pedir la Gracia para que el Espíritu Santo me ayude a conocer mis pecados y aborrecerlos.

Repugnar el mal, sentir repugnancia por todo lo que corrompe.

¿Qué es lo que más daño me hace a mi?

Pedir luz, escribir sobre esta idea.

 

Pedir la Gracia de descubrir y sentir todo lo que hay desordenado en mi. Lo torcido.

Los apegos me impiden ser libre. ¿Qué apegos hay en mi?

¿Tengo una jerarquía de valores?

¿Hay valores enfrentados en mi? Deut. 30,15-20
Oración de petición

Pide a Dios luz en este tema. De hecho al final de esta meditación tendrías que tener claro cual es el valor positivo, grande, que debe mover tu vida, y cual es el apego o desorden que tienes que eliminar.

Pide luz, y escribe alguna idea que resuma el mundo de tus valores.

 

La tercera Gracia: Pedir conocimiento del mundo en el que vivo, todo lo que me rodea.

Hay muchas, muchas cosas buenas por las que tengo que dar gracias a Dios.

Hay muchas cosas positivas que puedo hacer cada día.
También hay cosas a mi alrededor que me perjudican.

Luz y Gracia para distinguirlas y saber discernir.

 

Habla con el buen Padre Dios, dale gracias. Habla con Jesús, dale gracias también. Ponte junto al Corazón de la Virgen María. Es nuestra Madre: “Bajo tu amparo nos acogemos, Santa Madre de Dios”.  

Escribe algunas ideas sobre el momento que has vivido.




Al terminar

  1. Adoras en silencio. El tiempo que creas necesario.
  2. Puedes repetir la palabra o idea que más te haya llamado la atención.
  3. Das las gracias por el rato que has pasado en su presencia.
  4. Rezas despacio un Avemaría a Nuestra Señora.