Ejercicios espirituales online I

Esta propuesta de ejercicios espirituales es una guía para las personas o matrimonios que deseen avanzar en su relación con Dios y mejorar su vida. Se trata de una experiencia de oración flexible que se adapta a nuestra rutina habitual.


Al empezar

  1. Ponerse en Presencia de Dios: está aquí. me ama, me mira
  2. Un Padrenuestro, despacio
  3. En silencio: adorar
  4. Humildad, sentirse dependientes de Dios. Necesitados de todo
  5. Nos acercamos al trono de la misericordia
  6. Dar gracias: Por la vida que tengo. Por el día de hoy…
  7. Pedirle perdón.
  8. Pedir la gracia de vivir este día de Ejercicios Personalizados.


Día 15: Déjate perdonar, déjate reconciliar

Si puedes, haz este rato de oración delante de un crucifijo.

No puedo negar la realidad del mal en el mundo.
No puedo negar la realidad del pecado en mí.

Recordar Gen. Cap. 3º

Recordar también mis pecados.

Reflexiona sobre tu propia responsabilidad.

Lee algún salmo penitencial: el salmo nº 50

Párate en algún momento, reflexiona, repite las palabras del salmista

 

Reza despacio un Padre Nuestro.
Te detienes un momento de decir: “perdónanos”.

Déjate perdonar, déjate reconciliar

Guarda silencio: déjate perdonar, déjate reconciliar:

Reconcíliate con Dios.
Contigo mismo.
Con los demás.

 

Prepara tu reconciliación con el sacerdote.

Quita todo resentimiento.

Que la gracia sane, vaya sanando las heridas que produce el mal, el resentimiento.

 

Escribe lo que se te ocurra en este momento.

 

“Agua del costado de Cristo, lávame”

Señor, que tuviste piedad según tu misericordia:

De mis heridas, sáname, purifícame porque yo...

También estoy enfermo;
soy débil de voluntad;
me acobardo ante las dificultades;
me dejo dominar por el respeto humano;
tengo complejos.

Purifícame de todas mis inmundicias.




Al terminar

  1. Adoras en silencio. El tiempo que creas necesario.
  2. Puedes repetir la palabra o idea que más te haya llamado la atención.
  3. Das las gracias por el rato que has pasado en su presencia.
  4. Rezas despacio un Avemaría a Nuestra Señora.