El colegio Virgen de Atocha - FESD entrega la primera edición del premio «Fray Ismael Cuesta»
El galardón, que reconoce la excelencia en la oratoria estudiantil, rinde homenaje al dominico que dirigió el centro durante más de treinta años
El colegio Virgen de Atocha - FESD de Madrid entregó el pasado 9 de abirl la primera edición del premio Fray Ismael Cuesta durante la celebración de MICNU 2025, el Modelo Internacional de Naciones Unidas que organizan los propios alumnos del centro.
Este galardón, que se otorgará cada año al mejor orador de la edición, fue creado en memoria de fray Ismael Cuesta Modinos OP (1940-2024), quien fuera director general del colegio durante más de tres décadas. Su figura, profundamente ligada a la educación dominicana, fue recordada en el acto como ejemplo de diálogo, compromiso y pasión por una enseñanza crítica, participativa y evangelizadora.
José Manuel Gallardo, director actual del colegio, destacó en su intervención que «el padre Ismael fue un ejemplo para nosotros, porque los dominicos predican con la palabra, y homenajear a quienes saben volar con la palabra es muy importante». Además, valoró el acompañamiento de la Orden de Predicadores en este acto, representada por fray Iván Calvo OP, prior del convento de Atocha y por Fr. Ángel Fariña OP, párroco de la Basílica de Ntra. Sra. de Atocha y docente en el centro.
Fray Iván subrayó que «los dominicos nacimos de un diálogo, y creemos en el poder de la palabra para transformar el mundo». Recordó a figuras dominicanas como Vicente Ferrer, Catalina de Siena, Bartolomé de las Casas o Francisco de Vitoria como ejemplos del uso de la palabra en múltiples formas: desde la predicación hasta la defensa de los más débiles, desde la belleza del arte hasta el testimonio de vida. Y concluyó afirmando que «dedicar este premio a fray Ismael, un hombre de diálogo sereno y transformador, es el mejor homenaje que se le puede rendir».
Con este premio, el colegio Virgen de Atocha continúa fortaleciendo su identidad dominicana y su apuesta por formar estudiantes que, como decía fray Ismael, busquen siempre la verdad mediante un diálogo permanente.
