Celebración de Santo Tomás de Aquino: Conferencia de fray Sixto José Castro Rodríguez

Fray Sixto José Castro parte de una idea clave: el “autor Aquino” no es exactamente el mismo que el histórico Tomás de Aquino, sino una figura construida por cada época según sus necesidades, gustos y prejuicios. Apoyándose en reflexiones como las de Michel Foucault y en ejemplos como Newton o Stanley Kubrick, muestra cómo tendemos a recortar y simplificar a los grandes autores para hacerlos encajar en una imagen fija: en el caso de Santo Tomás, la del teólogo frío, lógico y analítico, aparentemente distante de la experiencia mística, a pesar de sus himnos eucarísticos, sus comentarios bíblicos y sus episodios de intensa vida contemplativa.

Recorre la historia de la recepción de Tomás de Aquino: desde la tensión medieval entre la tradición aristotélica dominicana y la línea platónico-agustiniana franciscana, pasando por las condenas parisinas de 1277 y su posterior canonización, hasta su influencia en el Concilio de Trento, la Escuela de Salamanca y la teología de la guerra justa, el derecho natural y el derecho de gentes. Explica cómo, tras el triunfo del nominalismo y el desarrollo de la modernidad, Tomás es progresivamente relegado, reducido primero a “comentador de Aristóteles”, luego confinado al mundo católico, relanzado con fuerza por el neotomismo del siglo XIX y, de nuevo, casi silenciado en el posconcilio Vaticano II, especialmente en el ámbito académico no eclesial.

Por último, Fray Sixto describe la revitalización contemporánea del pensamiento tomista: el tomismo histórico, que limpia capas interpretativas para volver al Tomás real; el tomismo analítico, que dialoga con la filosofía anglosajona actual; y los movimientos de renovación que integran mejor la historia, la Escritura y los Padres. Presenta ejemplos concretos como el Thomistic Institute y el proyecto Aquinas 101, que reintroducen a Santo Tomás en universidades y plataformas digitales. La conferencia concluye subrayando que hay “muchas vidas” de Santo Tomás de Aquino y que hoy se abre la oportunidad de recuperar una imagen más completa: no sólo el genio de la lógica y la metafísica, sino también el hombre de oración, contemplación y profunda sabiduría espiritual.